Entradas para la exposición World of Volvo en Gotemburgo

Nada más atravesar el atrio de madera laminada, un túnel multisensorial te transporta a 1927, año en que los primeros Volvo salieron de fábrica en Hisingen. Pantallas envolventes recrean la línea de montaje original, mientras piezas metálicas reales emergen de la pared para formar el icónico PV4. Un giro más y la exposición salta al presente: un área de realidad aumentada muestra cómo los algoritmos de asistencia al conductor “leen” el tráfico urbano para evitar colisiones, y puedes probarlo en un simulador de 180 ° que reproduce la lluvia de la costa oeste sueca.

En la zona “Concept Lab” las estrellas son el eléctrico EX90 y un prototipo de coche autónomo revestido de fibras recicladas. Tócales la puerta, enciende la interfaz y observa cómo reacciona la cabina inteligente cuando cambias la iluminación de “modo trabajo” a “modo relax”. Muy cerca, la exposición “People First” rinde homenaje a las innovaciones de seguridad: cinturón de tres puntos, jaula antivuelco y airbag lateral se explican con maquetas seccionadas y pruebas de impacto en vídeo a cámara ultralenta.

Para los más pequeños —y los jóvenes de espíritu— la sala “Kids at Wheel” ofrece circuitos de minicoches a pedales, estaciones de diseño donde se elige color de carrocería y un photo-call de rally que captura tu salto en alta definición. Cada sección termina con un reto interactivo que conecta tu visita con un marcador digital indicando cuántas vidas ha salvado cada avance.

La última planta alberga la pasarela panorámica: un balcón acristalado que mira al mar y a los astilleros donde todo comenzó, recordando que Gotemburgo sigue siendo la capital industrial de Suecia. Antes de marcharte, detente en la tienda: exclusivos modelos a escala, ropa técnica y accesorios fabricados con materiales recuperados de airbags dan sentido a la filosofía de circularidad de Volvo.