Excursión de un día al castillo de Dover, los Acantilados Blancos y Canterbury desde Londres

Esta excursión está pensada para que descubras lo mejor de Kent en un solo día, sin preocuparte por el transporte ni la planificación. La jornada comienza temprano, con salida de Londres desde puntos de recogida designados. Desde ese momento, tu guía te acompañará con comentarios en directo sobre la historia y el paisaje que vais atravesando.  

La primera parada es el castillo de Dover, conocido como la “Llave de Inglaterra” por su posición estratégica vigilando el Canal de la Mancha durante más de nueve siglos. Paseando por su imponente torre del homenaje, sus murallas medievales y sus túneles de guerra, comprenderás por qué ha sido clave en la defensa del país desde la Edad Media hasta la Segunda Guerra Mundial.  

A continuación, te acercarás a los Acantilados Blancos de Dover, un auténtico icono británico. Desde este dramático tramo de costa, formado por espectaculares paredes de tiza blanca, disfrutarás de vistas inolvidables del mar y, en días despejados, incluso de la costa francesa a lo lejos. Es una de esas panorámicas que hay que ver al menos una vez en la vida. 

Por la tarde llegarás a Canterbury, ciudad habitada desde tiempos prehistóricos y convertida en asentamiento romano en el siglo I. Aquí se alza la catedral de Canterbury, Patrimonio Mundial de la UNESCO y sede del arzobispo de Canterbury, líder espiritual de la Iglesia de Inglaterra. En ella tuvo lugar el célebre asesinato de Thomas Becket, hoy venerado como santo y mártir, lo que transformó el templo en uno de los grandes centros de peregrinación de Europa. 

Tendrás unas 2 horas de tiempo libre en Canterbury para visitar la catedral (si has seleccionado la opción con entrada incluida) y perderte por sus calles medievales, sus murallas y el río Stour, antes de poner rumbo de regreso a Londres, donde llegarás en torno a las 19:00.